lunes, 17 de junio de 2030

Rosa Barroso


Maracaibo, Venezuela 1991.
Poeta Guarimurana, formada a la luz de la Teoría de la Abstracción de la palabra poética; integrante del CCL Fobos y Deimos, Rosa Barroso convoca sus luchas en la palabra y describe las injusticias como metáforas que agujeran la vida, asume su postura de gladiador y resume el canto en su voz poética cargada de constelaciones milenarias; su poesía es la de un ciego, la de un animal desposeído, el verso de un labriego que siembra la sombra para rescatar la luz el día de la paz. Ha publicado “La Lágrima del Último Gladiador”, ediciones Libroris 2011. Su poesía le ha hecho merecedora de un segundo y un tercer lugar en el Premio de Poesía José Numa Rojas 2011 y 2012; recorre país con sus letras a cuestas y regresa a la república de Guarimure, el lugar de todos los lugares como Oficiante de la Palabra del Sistema Nacional de Centros de Creación Literaria, en el que forma a noveles poetas.

martes, 29 de julio de 2025

Mundos

 Llueve dentro,

de esta realidad alterna...

Un mundo que construí

desde las sombras,

cenizas...

Mis ojos viendo a un fénix

cuando en realidad era un thestral.

Negando tu ausencia,

la muerte.

La culpa acuña la trasgresión de las palabras,

esas que no se dijeron,

creando un agujero negro

donde convergen tu alma y la mía.

Luz …

Sombra...

Luna...

Estrellas...

Esta copa vacía a tus ojos

rebosante ante los míos,

viste todo lo que no fue,

yo vi todo lo que construyeron mis anhelos.

Tan aturdido por el abandono,

Yo tan presente,

comulgando con la soledad,

la escogida...

Ahora me apuñalas con la tregua del silencio diluido...

En estas lagrimas que besas

antes de dormir conmigo. 


ROELBANI

viernes, 25 de julio de 2025

Anfibológica

Termino conmigo,

acabo con esta indulgencia...

Porque siempre he sido yo,

la que permite la entrada,

el eco,

el vacío...

Siempre he sido yo,

la cura,

la enfermedad...

Termino conmigo,

esta versión absurda disfrazada de nobleza...

¿Cuántas veces me permito?

¿Dónde pongo el grito?

Ese que vivió tanto tiempo en el insomnio,

que se volvió silencio...

Se manchó la pagina,

el sueño,

la expectativa.

Siempre he sido yo,

la que se abandona,

me entrego,

vuelvo...

Donde fui una vez

un kraken hambriento

cazador de navíos,

diarios de piratas,

la letra,

tinta,

grafito...

Termino conmigo,

La rosa del jardín...

La espina en mi dedo,

la sangre tibia,

el tronco roto...


Roelbani.


jueves, 21 de febrero de 2019

Espíritu de Atalanta


Ella comulga así…

Con la lengua afuera y los labios entregados al lienzo,
camina con el tiempo suelto
entre sus cabellos
el aire,
extinta la decorosidad de sus gobernantes.
Ella quiebra la iniquidad,
no busca, hace justicia.
Entorpece credos de belicosos arrogantes,
camina descalza.
Ella colecciona los dedos que la apuntan,
los lleva con orgullo en su cuello,
sello de tolerancia,
ella sabe ser paciente,
su piel tiene un sabor agridulce
de color tornasolado.
Cuando ama se erizan sus vellos
destilando licor por sus poros
entregados a la perpetuidad nocturna.
Su mirada como la de los habitantes del mar
en lo profundo,
desconocido.
Ella sabe perpetuarse en el recuerdo de los náufragos
que llegan a su orilla,
deambula dormida
arrancando el sueño de niñas inocentes,
adoptadas por los antiguos amos,
los que dicen que es un dulce y como se come.
Ella florece cada vez que su alma grita,
lanza piedras,
que se convierten en castillos
donde habito ahora.

Roelbani.

lunes, 18 de febrero de 2019

Susurro


Aquí es donde se disfrazan los inmortales

En medio de la incertidumbre del sentir,
Asuntos que difieren entre no me importa y el látigo que voltea tu rostro cuando escuchas gritar a la doncella en peligro…
Esa que vive en tus entrañas,
Pequeña inútil,
¿¿Cuantas veces debo ir a tu rescate??
La misma piedra,
Entonces,
Definitivamente algo va mal.
Y es que no son las emociones,
Es que… te gobiernan…
Empiezas a dudar,
¿Mente humana?
¡NO!
Soy dueño de lo imposible…
¿Entonces?
¿El diablo?
¿ego?
Habitantes de la estratosfera,
La oscuridad a invadido sus pupilas,
Solo vemos lo que alcanzamos a escuchar en medio del bullicio
No alcanza a aclarar,
El universo comienza y termina dentro,
No existen límites ni fronteras,
Me he entregado a millones de voces sabias
Perpetuadas en el asesinato de la naturaleza,
Entonces sin muerte no hay vida… y viceversa.
No me encapsulo más en conceptos,
Aquí descubro mi libertad.

Roelbani.

miércoles, 6 de febrero de 2019

Tricolor

Distante,
el aliento gris que suspira su cielo
tóxico,
la alegría efímera de hacerme la loca cuando grita,
y cantamos,
un aullido.
Voy cruzando fronteras
diciéndome mentiras; nómada.
Mi alma siempre supo volar,
invadió cuerpos,
naciones,
planetas...
Hoy yace anclada,
en el recuerdo de la libertad sublime,
esa que se dibujaba en los atardeceres con olor a mar,
con olor a guitarra vieja,
a samán.
Porque allí quiere estar,
se compone de salitre,
orinoco,
guayaba,
turpiales,
iguanas,
caraotas,
y un pan que se comparte en el camino.
¡Despierta!
¡Están apuñalando tu cuerpo!
me dicen...
Oídos sordos,
la fuente está intacta,
aunque me secuestren la tierra
siempre encontraré el camino a casa.

Roelbani.

lunes, 28 de enero de 2019

Visión


 Decido recorrer el camino,
Aunque mis pies no quieran colaborar.
Despierto en medio de la seda que arropa tu fibra muscular,
Comparto el cosmos del deseo,
Te observo,
Con tus persianas caídas.
Frustrado,
Intentando recobrar las pulsaciones que rigieron tu juventud,
La carrera,
Regreso, donde me solté de la almohada.
Vuelvo a observarte,
Sin culpas,
Obstinado,
Sudado…
Estrangulando a Morfeo,
Detallo tus dedos asimétricos,
Hasta que mi mirada penetra tu conciencia.
Arrancas la atmósfera de mis arañas susurrantes,
Cabellos negros,
Salto,
Volvemos al inicio,
Donde las excusas brindaron por su aniversario,
Extinguiendo la creencia.
Construir un puente acaramelado,
Inocencia,
Dame tus entrañas como plato fuerte
Quiero saborear la luz,
Alquimista de esos errores Inyectados,
No son tú.
Se quién eres,
Lo sé, por que no he dejado de observarte.

Roelbani.